1. Utiliza el minimalismo para multiplicar el espacio

Uno de los mayores lujos de un cuarto de baño es el espacio, y nuestro enfoque minimalista hacia el diseño danés apuesta precisamente por tener menos elementos y más sitio libre. Los armarios de pared no necesitan patas, lo que permite que resplandezca y destaque la belleza de la pared y del suelo. Los armarios inteligentes con mucha capacidad de almacenaje pueden hacer la función de muebles y estantes de perfumes, y un lavabo integrado te permitirá disfrutar de espacio libre delante del espejo todas las mañanas. ¿Y acaso hay algo más preciado que el espacio libre en un cuarto de baño?

3. Concéntrate en lo «limpio»

Seguro que estás de acuerdo en que un baño necesita transmitir sensación limpieza. Y aunque es innegable que para obtener esa sensación es necesario limpiar, el minimalismo también ayuda a potenciarla. Los baños abarrotados con suelos atestados de cosas retienen la humedad del aire.  Una de las características distintivas del diseño danés es el espacio despejado alrededor de los elementos: en el suelo, en las paredes y a nuestro alrededor cuando nos movemos por la habitación. La ausencia de obstáculos facilita el acceso para poder limpiar, permite que el aire circule y crea un interior luminoso y ventilado que es un placer tanto para la vista como para el olfato.

4. Expande tu estilo de diseño

Tu estilo personal adquiere otra dimensión cuando los elementos de diseño de tu cocina armonizan con los del pasillo o los del cuarto de baño. Utilizar diseño danés, como el armario de baño Mano, te resultará tan familiar y natural como en la cocina y potenciará la sensación de bienestar en toda la casa.

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