Masterchefs junior: cómo hacer que los niños ayuden en la cocina.

Cocinar con niños puede ser una forma divertida e interactiva de enseñarles hábitos alimenticios saludables y el valor de los alimentos nutritivos. Es una excelente oportunidad para introducir sabores nuevos y emocionantes en su alimentación, a la vez que les enseñas a cocinar y preparar comidas por sí mismos. Al cocinar con ellos, no solo les enseñas habilidades útiles, también creas recuerdos positivos y contribuyes a construir vínculos familiares fuertes. Echa un vistazo a algunas de nuestras formas preferidas de llevar a los más pequeños a la cocina.

Involucrar a los niños en la cocina es una excelente manera de pasar tiempo de calidad con ellos mientras les enseñas habilidades útiles. Además de ayudarles a desarrollar sus conocimientos culinarios, también fomentarás hábitos alimenticios saludables y les enseñarás a ser responsables.

Estos son algunos de nuestros mejores consejos para que los niños ayuden en la cocina:

Comienza poco a poco y con tareas adecuadas para su edad

Comenzar poco a poco y con tareas adecuadas para su edad es un aspecto crucial a la hora de cocinar con niños. ¡No tiene sentido abrumarlos antes de que hayan empezado! Empieza con tareas que sean adecuadas para su edad y sus habilidades; eso les ayudará a adquirir confianza y hará que la experiencia sea más agradable.

En los niños más pequeños, las tareas sencillas como remover los ingredientes, verter líquidos o poner la mesa son buenos puntos de partida. Son tareas fáciles de realizar y requieren una supervisión mínima, lo que puede ayudar al niño a sentirse más independiente y capaz. Además, ¡son divertidas! 

A medida que el niño se vaya sintiendo más cómodo en la cocina, puedes aumentar gradualmente la complejidad de las tareas. Por ejemplo, puedes enseñarle a medir los ingredientes, picar verduras (¡busca cuchillos de iniciación apropiados para su edad!), o incluso a cocinar platos sencillos sin ayuda. Las pizzas o las tortitas son una manera fácil de comenzar y además están buenísimas.

Al aumentar gradualmente la complejidad de las tareas, podrás ayudar al niño a desarrollar habilidades útiles y un amor por la cocina que será beneficioso para él en el futuro.

Hazlo divertido

Hacer que cocinar sea una experiencia divertida y agradable para los niños es importante para mantenerlos comprometidos e interesados en aprender sobre alimentos y nutrición. Crear un ambiente divertido y relajado es vital y fácil de conseguir. Por ejemplo, permitir que elijan una banda sonora o una receta, o darles un delantal divertido para que lo usen puede hacer que se sientan más involucrados y entusiasmados con el proceso de cocinar.

También puedes convertir la experiencia de cocinar en un juego o concurso: una manera excelente de que los niños se sientan comprometidos y motivados. Puedes organizar búsquedas del tesoro de ingredientes, jugar a adivinar las especias o incluso organizar un concurso de cocina entre los miembros de la familia. Convertir la cocina en una actividad divertida también puede ayudar a los niños a desarrollar una actitud positiva hacia la comida y animarlos a probar cosas nuevas. Además, ¡te quita el peso de cocinar todas las noches!

Elegir un tema para una comida, como italiana o mexicana, es otra excelente manera de lograr que cocinar con niños sea una experiencia educativa y cultural. Puedes enseñarles la importancia de ciertos platos e ingredientes y ayudarles a conocer la historia y las tradiciones que hay detrás de los diferentes tipos de cocina. Esto puede ampliar sus conocimientos y su apreciación de diferentes culturas y cocinas. ¡Además de desarrollar sus pequeñas papilas gustativas!

Dales un sentido de propiedad

Anima a los niños a que se adueñen del plato que están ayudando a preparar. Deja que tomen decisiones sobre la receta, como elegir ingredientes o ajustar el condimento a su gusto. Permitirles que añadan más queso o pimienta les hará sentirse orgullosos y realizados.

Enseña seguridad

Asegúrate de que los niños entiendan la importancia de la seguridad en la cocina. Explícales cómo utilizar correctamente los utensilios de cocina, como los cuchillos o la placa de cocción, y supervísalos de cerca hasta que se sientan cómodos y seguros. Si los niños son pequeños, utiliza utensilios apropiados para su edad, como cuchillos o tijeras seguros para niños.

Haz hincapié en los hábitos alimenticios saludables

Cocinar es una excelente oportunidad para que los niños aprendan sobre hábitos alimenticios saludables. Anímalos a elegir ingredientes frescos y nutritivos y explícales por qué ciertos alimentos son beneficiosos para el cuerpo. Háblales de la importancia de llevar una alimentación equilibrada y ayúdales a elegir ingredientes saludables para sus comidas.

Elogia sus esfuerzos

Como padre, madre o cuidador, es importante que elogies y animes a los niños cuando se esfuerzan en la cocina, independientemente del resultado. El refuerzo positivo puede ayudar a desarrollar su confianza y motivación para continuar cocinando y aprendiendo nuevas habilidades dentro y fuera de la cocina. 

Aunque el plato no les salga perfecto, concéntrate en los aspectos positivos y anímalos a aprender de sus errores. Por ejemplo, puedes elogiarlos por intentar cocinar una receta nueva o terminar una tarea difícil, como cortar verduras. Eso les ayudará a desarrollar una mentalidad de crecimiento y los animará a seguir explorando y probando cosas nuevas.

Se acabaron las excusas: empieza hoy mismo

¡Se acabaron las excusas! Cocinar tus niños es fácil, divertido y gratificante. Comienza con tareas sencillas y apropiadas para su edad y conviértelo en una experiencia divertida y atractiva… para todos. Cocinar con tus niños les enseña habilidades útiles y fomenta hábitos alimenticios saludables y una actitud positiva hacia la comida. ¡Así que, poneros los delantales y empieza a cocinar con tus niños hoy mismo!